El cáncer de ovario es el tumor ginecológico asociado a mayor mortalidad. En la Argentina constituye la quinta neoplasia más común en mujeres, con aproximadamente 2.300 casos nuevos por año.

El cáncer de ovario es una enfermedad clínicamente silente hasta estadíos avanzados. Suele presentarse con síntomas inespecíficos que se confunden con problemas gastrointestinales (distención, dolor pélvico, falta de apetito, entre otros)

Por esta razón, sumado a que las formas agresivas tienen una rápida progresión en el tiempo, sólo el 20% de las pacientes se diagnostican en estadíos iniciales.

En TCba dedicamos especial atención a la imagen médica de la mujer a través de nuestro equipo experto que trabaja en forma coordinada con los especialistas para ofrecer un diagnóstico seguro y certero. Consultada la Dra. Gabriela Picco, especialista en Diagnóstico por Imágenes ginecológicas sobre esta problemática, nos afirma que la supervivencia del mismo está fundamentalmente determinada por el estadío al momento del diagnóstico*

¿Qué tipo de tumores de ovario existen?

En los ovarios hay tres tipos de células (epiteliales, germinales y estromales) y su crecimiento atípico puede dar lugar a una clase diferente de tumor que recibe el nombre de las células que lo originan. Así, tenemos tres tipos principales: 

• Los tumores epiteliales, que se originan de las células que cubren la superficie externa del ovario y representan la mayoría de los tumores ováricos.
• Los tumores de células germinales, que se originan de las células que producen los óvulos.
• Los tumores estromales, que se originan de las células del tejido estructural que sostienen el ovario y producen las hormonas femeninas estrógeno y progesterona. 

La mayoría de estos tumores son benignos, no se diseminan fuera del ovario y suelen tener resolución quirúrgica. Sin embargo, una pequeña parte son malignos (cancerosos) y estos sí pueden propagarse, haciendo metástasis en otros órganos y tejidos.

¿Todos los tumores malignos de ovario se comportan de la misma manera?
Haciendo referencia a los tumores malignos epiteliales de ovario que son los más frecuentes actualmente se reconocen dos grupos: los carcinomas tipo I y los carcinomas tipo II.

Los carcinomas tipo I son tumores menos agresivos de crecimiento lento (tiempo medio de evolución del estadío I al estadío III de 2-5 años) por lo que es posible realizar un diagnóstico en un estadío precoz.

Los carcinomas tipo II son tumores agresivos de desarrollo rápido (tiempo medio de evolución del estadío I al estadío III de 8 meses) por lo que la mayoría se diagnostican en estadío avanzado, situación que se da en el 70-80 % de los casos.

¿Cuál es el método más frecuente para el diagnóstico de cáncer de ovario y qué elementos se buscan?

La Ecografía Transvaginal con Doppler se considera el método de primera elección para el diagnóstico diferencial de las masas ováricas.

Existen patrones ecográficos típicos que permiten reconocer ciertas lesiones, pero asimismo contamos con guías internacionales (IOTA) que brindan criterios objetivos de benignidad y malignidad que nos posibilitan determinar de acuerdo a las características de la imagen ovárica (tamaño, vascularización, presencia de áreas sólidas, etc.)  si estamos ante una lesión benigna, maligna o no clasificable.

También resulta muy importante mencionar que se han desarrollado aplicaciones basadas en sistemas que calculan el riesgo de malignidad de una imagen ovárica (ADNEX model) a través de ingresar datos clínicos de la paciente, valor del marcador tumoral CA 125 e información específica de los hallazgos por imágenes.

¿Cuál es el paso a seguir en caso de que las imágenes ecográficas no sean concluyentes para el diagnóstico?
Ante lesiones de riesgo intermedio o de aspecto indeterminado por ultrasonido, se propone la RM ginecológica pelviana con contraste como técnica de segunda línea para avanzar en la caracterización de sus componentes.

También resulta importante correlacionar los hallazgos por imágenes con los resultados de los marcadores tumorales obtenidos del laboratorio. 

¿Existen protocolos de screening por imágenes para el diagnóstico temprano del cáncer de ovario, así como sucede con el cáncer de mama? 
Si bien en la actualidad no contamos con trabajos que avalen un screening por imágenes efectivo para el diagnóstico del cáncer de ovario, resulta nuestro desafío en la práctica diaria poder detectarlo en estadíos tempranos y con un volumen pequeño para conseguir mejores resultados terapéuticos que impacten sobre la reducción de la mortalidad de la paciente.

Realizar un diagnóstico temprano, puede salvar la vida.

Dra. Gabriela Picco
Médica Especialista en Diagnóstico por Imágenes Ginecológicas

* Fuente: Coalición Mundial Del Cáncer de Ovario (WOCC)